Para que todos los elementos estructurales (vigas, columnas, techos, muros, cimientos) trabajen en conjunto, como si se tratara de una sola pieza, es muy importante que la unión entre ellos sea buena; por ejemplo, la unión entre el muro portante y sus columnas de confinamiento debe ser consistente (Ver figura 23). En la obra, esta buena unión se logra mediante dos procedimientos:
a. El endentado del muro
b. Las mechas de anclaje
Revisemos cada uno de los procedimientos:
La Norma E-070 se refiere a este tema y nos dice: “La longitud del diente no debe exceder los 5 cm y deberá limpiarse de los desperdicios de mortero y de partículas sueltas antes de vaciar el concreto de la columna de confinamiento.”
Si el “diente” es mayor de 5 cm, (Ver figura 23), es probable que éste se rompa debido al peso del concreto que lo impacta cuando se hace el vaciado. Y si el “diente” no se rompió debido a este impacto, el concreto no llenará completamente el espacio entre los “dientes” y formará “cangrejeras”. (Ver figura 24).
En el caso de emplearse una conexión a ras, se deberá contar además
con “mechas” de anclaje compuestas por Corrugado 4.7 mm. de Aceros
Arequipa. (Ver Capítulo 2, página 37).