La vibradora se utiliza para eliminar las burbujas de aire en la mezcla, que se forman al momento de su colocación, logrando un concreto más denso y resistente, y una mejor adherencia de éste con el acero.
La vibradora debe colocarse directamente en la masa del concreto, en posición vertical. El vibrado debe terminar cuando ya no aparezcan burbujas de aire en la superficie del concreto. Un tiempo excesivo de vibrado puede hacer que la piedra se separe del resto de la mezcla.
Hay dos tipos de vibradora, la eléctrica y la gasolinera.