Una vez hecho el trazo, éste nos sirve de guía para excavar el terreno, ubicar el encofrado, plantar las columnas, levantar los muros, etc. Pero una vez culminado cada uno de estos trabajos, es muy importante volver a verificar el trazo inicial, así como los niveles. A esto se le denomina replanteo.
El replanteo es de suma importancia. Se debe verificar los niveles y el trazo constantemente, esto nos garantizará que la construcción tenga los ejes perpendiculares, que los ambientes de la casa tengan las dimensiones que se especifican en los planos y que los niveles de los pisos sean los correctos.
Si se desea marcar nuevos puntos de nivel entre los que ya han sido determinados, se pueden usar “niveletas”, las cuales nos sirven para facilitar la horizontalidad de nuestra visión. La “niveleta”, que servirá para marcar el nuevo punto de nivel, se sube o baja de acuerdo a la indicación del visor, hasta que las tres estén niveladas (ver figura 67).