Antes de iniciar la obra, es de suma importancia revisar con detenimiento todos los planos consistentes en arquitectura, estructuras, instalaciones sanitarias e instalaciones eléctricas, de tal manera que se conozca el proyecto en su totalidad.
Asimismo, debemos revisar las especificaciones técnicas, las cuales nos indican las resistencias del concreto, los tipos de ladrillo a usar, el ancho de juntas en los muros y las dimensiones de las armaduras, tales como traslapes, recubrimientos mínimos, diámetros de doblado, etc.
Esto evitará futuros problemas durante la construcción, como la falta de prevención de empotramiento de tuberías tanto de luz como de agua, algunos detalles de arquitectura que no han sido incluidos en las estructuras o viceversa, etc. Todos estos problemas generan retrasos, trabajos mal hechos, desperdicios, mala calidad y mayor costo de la vivienda.